Todas las noches son de lujo en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional, pero la del sábado 18, será especial, de paisajes líricos dibujados por el saxofón. Nos deleitarán, a partir de las 8,30 pm, el estadounidense David Liebman y el boricua Miguel Zenón. Una vez más, con motivo del Jazz Plaza, tenemos en nuestros escenarios lo que más vale y brilla de la jazzística mundial.

Aunque además toque la flauta, el clarinete, el piano y la batería, Dave Liebman es más conocido como saxofonista (saxo soprano y tenor). El neoyorquino se mueve entre los estilos jazz fusión y post bop. "El jazz es muy flexible y estamos acostumbrados a la fusión con otras músicas- ha dicho el también compositor. En YouTube se puede encontrar una magnifica versión suya, a lo Latin Jazz del tan versionado tema Bésame Mucho. Muestra un sonido lírico y magistral, prolongación de la búsqueda de ese clásico de saxo que es John Coltrane, especializándose en el saxo soprano. En su ejecutoria combina ritmos complejos con silencios, con registros preeminentemente agudos y sobreagudos. Desde 1973, aparece regularmente como soprano en los puestos destacados de los polls de la revista especializada Down Beat.

Liebman comenzó su carrera profesional en 1968, formando parte de una banda que incluía a Pete La Roca, Steve Swallow y Chick Corea. Su primera grabación la realizó junto a Terumasa Hino, y después lo hizo nuevamente junto a John McLaughlin, antes de incorporarse al grupo "Ten Wheel Drive", al que también se incorporó Pee Wee Ellis. Ha tocado, entre otros con Elvin Jones, Joe Farrell, Steve Grossman y Frank Foster. Con el gran Miles Davis grabó en 1972 y estuvo de gira entre 1973 y 1974.

Nos vuelve a visitar el saxofonista, compositor y conceptualista puertorriqueño Miguel Zenón. Considerado como "el más poderoso saxo alto de la nueva generación del jazz latino de vanguardia y principal valor del jazz puertorriqueño". Comenzó a estudiar saxo clásico a los once años en la Escuela Libre de Música de Puerto Rico, hasta los 17 en los que viajó a Berklee College Of Music. En los Estados Unidos conoció y se enamoró del jazz. Ha contado que al abordar la composición nació su interés por sus raíces puertorriqueñas, de las que sabía poco.  Ya pertenece al selecto grupo de músicos que ha logrado equilibrar magistralmente los polos de la innovación y la tradición.

Desde su primer trabajo discográfico Looking Forward (2002), Zenón mostró un hermoso sonido, con un timbre muy bop, junto con una filosa sensibilidad interpretativa. Es un saxofonista enérgico y de registro poderoso. Los diez discos editados por él han sido valorados por los medios con las más altas calificaciones. Ha grabado también más de 50 registros discográficos en colaboración con otras grandes figuras del jazz, entre los que se destacan, Charlie Haden, Fred Hersch, Kenny Werner, Bobby Hutcherson y Steve Coleman.

Zenón y Liebman son dos virtuosos del tan difícil instrumento. Dos brillos del saxo jazz, con personalidades propias, registros y temperamentos distintos. Dos modos de sortear las grandes influencias y de reinventar los aportes de Lester Young, Coleman Hawkins, Dexter Gordon, Charlie Parker y el ya mencionado autor de A Love Supreme.